Un paraje que combina el azul del agua plácida con el verdor de los bosques, más una atmósfera espiritual de gran presencia, es el ambiente resultante que envolverá su boda en Valle de Bravo. Dado que es un gran destino turístico, la ciudad está siempre preparada para recibirlos con sus mejores galas.
Las calles de Valle de Bravo mantienen el aire colonial de su fundación, ya que además tienen la denominación de pueblo mágico por ser una localidad que protege su riqueza cultural y tradicional. Pasear por esta encantadora zona, en esa velada tan especial, será toda una experiencia que siempre atesorarán ustedes y sus seres queridos.
Esta población está llena de encanto, con además distintos templos e iglesias para realizar su ceremonia sin importar su religión, como el santuario de Santa María Ahuacatlán, la iglesia Virgen de Guadalupe, e incluso estupas budistas. Es así como dar el “sí” se podrá realizar en el entorno predilecto por las parejas.
La mayoría de espacios al aire libre aprovechan la costa con la laguna, tanto en Santa María Ahuacatlán como Avandaro y San Lorenzo. Además, estarán rodeados de las vistas a los paisajes naturales, que se caracterizan por su frondosidad durante todo el año. Con un clima bastante templado, es una localidad idónea para celebrar en jardines sin importar la estación. En el interior, rodeando Santa María Pipioltepec, hallarán también distintos oasis de paz que se alejan del bullicio de las calles principales, garantizando así la tranquilidad que tanto desean en su velada.