Cómo desinvitar a alguien de una boda: 8 tips para hacerlo educadamente

Para celebrar su historia de amor, su siguiente etapa y toda la energía dedicada a los preparativos, las parejas merecen disfrutar de su boda con quienes elijan. En algunos casos, esto puede significar tomar decisiones difíciles sobre la lista de invitados. Estos tips para desinvitar a alguien de la boda con educación les pueden ayudar en una emergencia, así que revísenlos cuidadosamente.

• 1. Analicen si realmente es necesario hacerlo
• 2. Prepararse emocionalmente para las desinvitaciones
• 3. No lo posterguen
• 4. Elijan su medio cuidadosamente
• 5. Tengan tacto
• 6. Sean honestos y diplomáticos
• 7. Sean firmes
• 8. Mejor prevenir que desinvitar

1. Analicen si realmente es necesario hacerlo

Aunque desinvitar a alguien de la boda es un último recurso, hay algunos casos en los que es necesario. Durante y después de la pandemia, por ejemplo, las bodas han sufrido cambios constantes que han hecho que las parejas posterguen o cancelen su celebración y, por lo tanto, desinvitar a los invitados ha sido inevitable. También, sobre todo durante la pandemia, hubo casos de parejas y locaciones que solicitaban que los invitados estuvieran vacunados, por lo que aquellos que no lo estaban solían omitirse de la lista, especialmente si las parejas contaban con la presencia de seres queridos vulnerables a enfermedades contagiosas.

Otras causas más personales para desinvitar a alguien puede ser el distanciamiento o la poca convivencia con ciertos invitados. Además, algunas parejas se encuentran con invitadas o invitados que hacen demandas poco razonables (ajustes al menú, querer llevar a personas extra, esperar transporte especial...) o que no aceptan las reglas que los novios y las locaciones establecen para la celebración. Si alguno de todos estos casos es el suyo, las desinvitaciones son válidas.

Las desinvitaciones no son fáciles de hacer y, para evitar sumar estrés a la boda, es recomendable que se pregunten si pasar por este proceso vale la pena o si podría ser inevitable. Pregúntense si la presencia de los posibles desinvitados en la boda realmente hará una diferencia para la celebración e, incluso, si les causará más problemas después de la boda. Quizás los invitados en cuestión desistan por sí mismos de asistir. Pero, si no encuentran otra solución, tendrán que…

2. Prepararse emocionalmente para las desinvitaciones

Desinvitar a alguien puede despertar muchos sentimientos en las parejas: ¡nadie quiere pasar por eso! Pero, aunque parezcan situaciones inusuales, una gran cantidad de parejas que se casan se ven en la necesidad de quitar de la lista de invitados a alguien.

Cuando las desinvitaciones tienen que ver con razones que escapan a la pareja, es probable que sientan mucha tristeza y frustración al tener que informar a sus invitados de este cambio de planes. Este caso fue muy común durante la pandemia.

Las parejas experimentan mucha incomodidad y culpa al desinvintar a alguien. Todos estos sentimientos pueden presentarse, pero, si no queda otro recurso deberán afrontarlos como parte de la experiencia de organizar una boda: tristemente, no todo puede ser positivo en el proceso.

Por un lado, puede ayudar pensar que la mayoría de las desinvitaciones no son una sorpresa: cuando es necesario retirar la invitación a alguien cercano a los novios suele ser por causas de fuerza mayor y los invitados VIP, generalmente, están al tanto de dichas emergencias. La mayoría de los invitados comprenderá la razón para ser desinvitados y algunas personas incluso se sentirán aliviadas de tener "permiso para faltar". Después de todo, la boda es para la pareja y hay que priorizar el bienestar.

3. No lo posterguen

Tanto si la desinvitación es por causas de fuerza mayor como si es por una decisión firme de la pareja, lo mejor es realizarla lo antes posible. Es recomendable que no usen términos como "posponer" o “dejar pendiente la invitación”, pues las personas estarán esperando noticias sobre la fiesta sin saber que ya no asistirán. Además, de esta manera evitarán que las personas desinvitadas gasten en ropa para la fiesta, regalos, transporte, entre otros. Es mejor evitar cualquier razón para crear resentimiento entre sus familiares y conocidos.

4. Elijan su medio cuidadosamente

Si su desinvitación se deberá a una cancelación, postergación de la boda o reducción en la lista de invitados, puede funcionar enviar un correo electrónico para informar de la situación y ser claros respecto al asunto. Un ejemplo de estos mensajes puede ser: "Amigos y familiares: les informamos que, por causas fuera de nuestro control, ya no podremos festejar nuestra boda como lo habíamos planeado. Con mucha tristeza, les avisamos que la celebración queda cancelada."

En caso de que ya tengan otra fecha programada o una lista de invitados nueva envíen misivas posteriores con información actualizada para ellos. Así, no tendrán que comunicarse con los invitados no contemplados.

Si habrá que desinvitar a personas cercanas, puede ser mejor que lo hagan de frente para que expresen sus sentimientos. Por otro lado, si se trata de parientes lejanos, podrían pedir a otros familiares (papás, mamás, abuelitos, tías) que expliquen la situación por ustedes. Es conveniente evitar llamadas y mensajes de texto, pues tienden a ser muy informales para este tipo de asuntos.

5. Tengan tacto

Así como ustedes estarán pasando por un momento difícil al hacer la desinvitación es necesario que sean empáticos y comprensivos con las personas que reciban este aviso. Expresen la tristeza que les genera hacer la desinvitación, pero también el cariño que sienten por las personas desinvitadas.

Por otro lado, si los desinvitados no tienen una relación estrecha con ustedes, la mejor forma de comunicarles su decisión es ser concisos y firmes. La honestidad es la mejor herramienta: expresar lo que significa para ustedes la boda y lo difícil que ha sido tomar esta decisión mejorará la comprensión mutua.

Seguro se están preguntando ¿cómo cancelar una invitación a una persona? La respuesta es que deben ser breves y no explicar de más sus razones para esta decisión. Esto puede parecer contradictorio, pero mantener breve y sincero su aviso les ahorrará interrogantes incómodas.

6. Sean honestos y diplomáticos

En algunos casos, negociar con los invitados puede ser suficiente para que asistan a la boda: expliquen, por ejemplo, si es cuestión de gente extra: “nos encantaría contar con tu presencia, pero el presupuesto solo nos permite un invitado extra por cada invitado en la lista”. Ser sinceros, directos y comunicarse asertivamente con sus invitados podría ser clave para evitar la desinvitación.

Con suficiente diplomacia, los invitados en cuestión pueden rectificar y asegurar sus lugares. Es importante que sean claros sobre la cancelación hasta que los cambios sean efectivos. También, pueden sugerir otro tipo de reunión, por ejemplo, la asistencia a través de medios digitales a la fiesta o, bien, la presencia de estos invitados particulares en otra celebración, como un wedding brunch.

Otra opción es dejar claro que solo los seres queridos más cercanos están invitados, pero que, si alguien cancela en un tiempo prudente, se puede extender una invitación extra. En caso de personas con poca relación con ustedes, esta podría ser una oportunidad genuina para reconectar, aunque, ya que esa no es la prioridad de la boda, se puede dar preferencia a otros invitados.

7. Sean firmes

¿Cómo decirle a una persona que no esta invitada? Una vez tomada la decisión de desinvitar, no lo piensen más. No se dejen convencer por ningún tipo de presión externa: ustedes saben lo qué es mejor para su boda.

Ser firmes es especialmente importante si hay personas que se han "autoinvitado" a la boda: invitados de trabajo, contactos en las redes sociales y familiares lejanos pueden sentirse con el derecho de asistir al evento, pero, si ustedes no desean contar con su presencia, es importante que no expresen ningún tipo de insinuación sobre una invitación. Este es, más o menos, el mismo caso cuando los invitados asumen que los niños también pueden asistir al evento y ustedes desean festejar solo con adultos. "Estamos organizando una celebración íntima y el número de invitados será reducido. Muchas gracias por entender." Este tipo de frases puede bastar para dejar el mensaje claro.

8. Mejor prevenir que desinvitar

Quizás ahora ya saben qué responder a la pregunta, ¿cómo desinvitar a alguien de una boda? Sin embargo, no está de más recordar que la mejor forma de evitar todo tipo de estrés o dramas es organizar cuidadosamente su lista de invitados. Desde el principio, sean honestos consigo mismos sobre los posibles invitados que los hacen sentir incómodos y descártenlos de inmediato. Es preferible dar una explicación breve a los posibles reclamos por no haber recibido una invitación que tener que cancelar la inclusión de alguien en la boda.

La organización de la boda puede tener partes difíciles, pero juntos podrán navegar esas aguas borrascosas y resolver los problemas para vivir una gran experiencia. En la Comunidad de Bodas.com.mx podrán compartir su proceso con otras parejas y aprender de novios y novias como ustedes.

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