Famoso por su cultura, parques nacionales, y rincones declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el estado de Querétaro es una alternativa espectacular para las parejas del centro del país. Limita con el Estado de México, Guanajuato, Michoacán, Hidalgo y San Luis Potosí, de manera que los enamorados que residan en estas regiones no tendrán problema alguno para encontrar una encantadora hacienda donde realizar su boda.
Muchas de las haciendas aún se mantienen en pie en la capital del estado, formando parte de la panorámica queretana. Desde el centro hasta los confines del municipio, se expanden estas estructuras que datan de tiempos anteriores a la independencia. En Corregidora, El Marqués, Colón, Tequisquiapan, Bernal y San Juan del Río, hallarán aún más fincas esparcidas por el territorio, alejadas de los centros urbanos y aprovechando al máximo los entornos ajardinados.
Más allá del municipio de Querétaro, donde estas casas antiguas se agolpan en la ciudad y las afueras, la mayoría de estas se encuentran en carreteras secundarias y desvíos principales. Eso permite que los recintos dispongan de mayores y espléndidas áreas verdes donde realizar el banquete, así como la posterior fiesta.
El estilo escultórico de las haciendas nace en la época colonial y el virreinato, muchas de ellas conservando molduras, acabados, y texturas originales. Algunas construcciones más actuales se inspiran en este estilo, por lo que no importa cuál elijan, lo que es seguro es que su boda se coronará como un evento lleno de encanto.