Por su hospitalidad y por su extensa oferta de espacios, paisajes, gastronomía y vinos, Querétaro es uno de los estados del interior de la República más atractivos para las bodas. ¡También para las sesiones de fotos más románticas! Tanto en la capital queretana como en el resto del estado encontrarán multitud de lugares especiales para sus fotos en pareja.
Empezamos por la capital, Santiago de Querétaro, cuyo Centro Histórico es Patrimonio de la Humanidad. De esta ciudad colonial les llamarán la atención sus edificios y monumentos históricos. Desde La Casa de La Corregidora, cuna de la Independencia de México, hasta el Cerro de las Campanas, el Teatro de la República, el Antiguo Convento de San Agustín o el Acueducto, Querétaro les irá contando parte de su historia si deciden recorrerla para sus fotos de novios.
En caso de que busquen espacios igual de clásicos, pero menos concurridos y con más privacidad para sus fotos, en Querétaro capital descubrirán una amplia variedad de hoteles boutique. Si este estilo clásico les gusta, tampoco dejen de explorar las exhaciendas restauradas que hay repartidas por todo el estado o las misiones franciscanas de la Sierra Gorda.
Precisamente la Sierra Gorda de Querétaro es un destino fantástico para los novios más intrépidos que busquen sesiones de fotos al aire libre. Por ejemplo, practicando kayak en la Presa de Jalpan, adentrándose en la Puerta del Cielo o refrescándose en las aguas del río Escalena en Puente de Dios. Con menos adrenalina, pero mucho más sabor, los viñedos y las queserías de Querétaro son otra opción ideal para las parejas más gourmet. En este tipo de fincas, que abundan en El Marqués y Cadereyta, las luces y los contrastes del atardecer darán un acabado muy romántico a cada toma.
Si siguen con ganas de pueblear Querétaro, no dejen fuera de su lista de locaciones para sus fotos a Bernal, San Juan del Río o Tequisquiapan, donde además podrían contratar un vuelo en globo aerostático. ¿No sería un plan perfecto para una sesión de compromiso?