La boda de Mónica y Óscar en Tonalá, Jalisco

La crónica de nuestra boda

El día de nuestra boda llegó, después de mucho tiempo de planificación y esfuerzos. Como la mayoría de la organización la hicimos entre mi pareja y yo, el último mes antes del evento se tornó muy complicado entre el trabajo, familia y pendientes que realizar fueron días de mucho estrés pero siempre avanzamos en todo lo que teníamos por hacer ya que teníamos un plan trazado, y si bien las cosas no salen como uno las planea, siempre que se salgan de control puedes regresar al camino.

Comenzó el momento de la ceremonia y para mí todo transcurrió de manera tranquila con mi familia preparándose, las fotos previas, el traslado a la iglesia y la llegada al mismo, pero cuando comencé a entrar a la iglesia y estando a punto de entrar sentí que el cuerpo me pesaba demasiado y todo lo que no había sentido me llegó a ese momento donde en tu cabeza estás solo y hay un largo pasillo para ingresar. Después inició la caminata, entraron las familias y amigos y por último la novia, que en mi caso no había visto el vestido, así que todo fue una gran sorpresa. Al final la misa fue muy amena y dinámica, la iglesia estaba arreglada muy bien y las fotos quedaron espectaculares.