La boda de Everardo y Angelina en Monterrey, Nuevo León
Elegantes Otoño Blanco 6 profesionales
E&A
05 Nov, 2022La crónica de nuestra boda
Ese día me levanté y lo primero que pensé fue "¡es hoy!" ¿nerviosa? Sí, fui al salón de belleza para peinado y maquillaje, tardó un poco más que lo que se había planeado y ya debía estarme arreglando porque mi civil era a las 12:00. Llegué a tiempo incluso para tener la sesión getting ready en casa. Tenía la mente en blanco mientras me ayudaban con mi vestido. Lista para salir, me miré al espejo, respire hondo y dije: "estoy lista", llegamos a tiempo al civil, diría que justo a tiempo. Fue breve pero muy bonito, porque estaba ahí viendo que la persona que amo hiciera la misma firma que la credencial (es broma si estaba seguro).
Salimos de ahí para ir a nuestra sesión de fotos ya como marido y mujer ante la ley, el lugar ¡wow! no creí que las cosas simples hicieran una foto magnífica. Hora de la iglesia, todo listo, mi papá tuvo un accidente hace un año y está en silla de ruedas, mi hermano me llevó por el pasillo, y en el último tramo mi papá se levantó y camino conmigo para entregarme; ya uno frente a otro, prometimos amarnos siempre y ser guiados por Dios.
Seguir leyendo »¡Vamos al salón! como marido y mujer ante los ojos de Dios; fuimos atendidos por nuestra vendedora y el capitán de meseros, muy amables, se dio tiempo para que llegaran nuestros invitados. Y entramos... fotos, videoclip, el saxofonista, los juegos, todo bien organizado. Es verdad cuando dicen que no puedes comer, pero no por nervios (bueno tal vez sí), sino por el vestido, no estaba tan apretado pero no pude comer más..
La comida deliciosa, todo era a base a de pollo, pero preparadas de una manera que no había visto en otros salones, los patés para el aperitivo, quisiera que me lo hubieran dado también para llevar, la crema de la entrada diferente a la usual de brócoli y elote, era de poro y papa la cosa más deliciosa del mundo, el plato fuerte pollo en salsa florentina, como de especias con espagueti y puré de papa (no podía faltar) y el postre un pastelito medio gelatinoso y un helado parecido al mordisco. Se acabó el pastel de bodas, era de lo que temía que no les gustará pero parece que sí.
Aunque fue algo simple sin baile ni bebida, fue mágico, los invitados se divirtieron con los juegos y la cabina de fotos, deseamos una recepción tranquila donde la gente pudiera conversar sin tener que gritar o gastarse la voz hablando. Mi esposo no lo niega, él si estaba nervioso desde el civil, pero poco a poco se le fue pasando y lo disfruto hasta el final. Nos encantó todo de nuestra boda, desde los nervios de la mañana hasta el final.
Servicios y Profesionales de la Boda de Everardo y Angelina
Otros Proveedores
Otras bodas en Las Lomas
Ver todas
Otras bodas en Nuevo León
Ver todas
Hacienda Paraíso Eventos
Quinta Terracota
Las Nubes
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario