La boda de Rodrigo y Jazmín en Acapulco, Guerrero

Durante la recepción recibimos a nuestros invitados con cocos, que después de tomar el agua podían pedir que los abrieran para comer la carnita del coco. De nuestra mesa de dulces se encargaron nuestros amigos Carlos y Rut quienes recientemente también se casaron, cuidaron cada detalle, todo empaquetado con cajas de novio y novia con dulces salados, picantes y chocolates.

Tuvimos una increíble sesión de fotos familiares, jugamos el juego del zapato, un juego que tomamos de inspiración en Pinterest y quisimos hacer algo diferente con el ramo que quedó padrísimo en el video y que todas se divirtieron. Bailamos nuestro primer baile, una canción que amamos y que no es muy común, Solo tú de Samuel Adrián y bailé con mi papá una canción que él me ha cantado desde pequeña, Chiquilla bonita de El Buki. Tuvimos nuestro baile familiar y mi esposo me cantó una canción con Mariachi Imperial Acapulco, si nos dejan de Luis Miguel. Durante la cena un increíble músico llamado Edgar de Merlan Sax tocó el saxofón, todos quedaron encantados con sus interpretaciones.

La cena estuvo deliciosa, nuestro gran amigo de banquetes Jossimar se encargó de la entrada que fue una deliciosa crema poblana con queso y crutones con el picor equilibrado para todos los paladares. En el plato fuerte, una pechuga rellena de jamón, piña, queso, plátano macho y espinacas bañada en crema de champiñones, acompañado de puré de papa con pimientos y unas verduras salteadas con chile que quebrado y el menú infantil unas ricas hamburguesas con papás fritas, todos quedaron encantados, llenos, pues las porciones eran más que suficientes y nadie se quedó con hambre. Nuestro pastel fue de la pastelería Cristal, de las mejores del puerto, el diseño quedó tal como lo imaginamos y el sabor mejor de lo que esperamos.

También nuestro amigo de Pirotecnia Rocket quien levantó el evento con chisperos fríos y fuegos pirotécnicos hizo un gran trabajo y finalmente nuestros amigos de tres dieciséis fotografía y vídeo quienes también son cristianos e hicieron un increíble trabajo cubriendo cada momento durante la boda y cuidando cada detalle; sin duda valió la pena la espera y la planeación. Agradecemos a todos los proveedores, familiares y amigos que hicieron posible nuestro sueño, pero sobre todo agradecemos y glorificamos a Dios quién nos ha dado más de lo que esperamos, cómo solo Él sabe hacerlo. Ecl 4:9-10 Jazmín y Rodrigo, mejores son dos que uno.