La boda de Ricardo y Lizet en Monterrey, Nuevo León

Bueno pues nos fuimos a las fotos (por cierto, super equis y poco rescatables) y en plena sesión con el tiempo encima porque había que llegar a la sesión con la familia de mi novio, pasa "una viejita" y le empieza a preguntar cosas a mi fotógrafo y le pide su teléfono y quien sabe cuanto y nosotros en pleno barrio antiguo, solaso y el tiempo encima y nosotros histéricos, de plano nos seguimos caminando y le dijimos al fotógrafo que se apurara y ni así entendió. Bueno pues obvio yo ya toda acelerada donde me dijeran me paraba para la foto, ya me daba igual, termino la sesión y obvio ya no alcanzamos a ir con mi suegra, porque ya era hora del civil.

Nos fuimos al civil, estuvo bellisima la ceremonia, y la religiosa ni se diga, la verdad mi marido me tenía risa y risa con sus ocurrencias, y hasta el padre estaba atacado de la risa. Y una de las razones era porque los arreglos estaban tan pesados que se caían y se caían (los laterales del piso y el pie de altar).

Ah y no me lo van a creer pero a la hora de pasar a firmar nosotros el acta que me voy dando cuenta que no era nuestra acta! De verdad les juro que me quería morir, quería arrancarme llorando y no parar, pero el sacerdote me relajó y no alcancé a llorar.

Ya estando en la recepción, les cuento que me hicieron mal el velo pues la peineta la cosieron al reves y me lo tenía que poner debajo del chongo por lo que se me caía y se me caía hasta que de plano entré al vals sin velo! me quería morir pero me relajé y me valió, todo estuvo genial, el DJ fue lo mejor que he escuchado y super buen precio! Si quieren les paso el dato, hizo un ambientazo que al final pagamos una hora extra y queríamos dos pero el salón ya no nos podía dar servicio por permisos municipales. En fin todo estuvo divino, espero que no se me haya pasado ningun dato chusco o importante. Bueno solo uno triste, que justo con mi tía la que falleció (que fue como una segunda madre para mis hermanos y para mí) no tengo foto por culpa del fotógrafo, que tenía que estarle diciendo aquí tomame foto o con tal o cual, de él no salía ninguna sugerencia! Y yo embolada ni cuenta que no tenía foto sola con ella y lo mas triste es que ella se quedó con esa tristeza, pensó que a mi no me importó Pero en fin, fuera del pésimo servicio de fotografía y video, todo estuvo maravilloso, la gente la gozó y nosotros también.

Gracias por leerme, ¡si me acuerdo de algo más lo agrego!