La boda de Paulino y Susy en Puerto Vallarta, Jalisco

Estuvo increíble desde la mañana, en ningún momento me entraron nervios ni estrés, como muchas saben, para ese día, yo ya estaba embarazada y lo que menos quería era sentirme presionada, sólo quería disfrutar cada instante.

Cuando nos levantamos, mi esposo fue por la esposa de mi papá a su hotel, pues ella es estilista y me peinaría, llegaron y mi esposo se fue a casa de sus papás para arreglarse, se llevó a mis hijos y él se hizo cargo de arreglarlos también, así que yo estaba muy relajada, ya en el hotel, mi mamá, la esposa de mi papá, mi hermana y yo, estábamos en el arreglo de las 4, como muchas saben, yo soy maquillista, así que gracias a que yo estaba súper tranquila y sin estrés, pude maquillar perfecto a mi mamá, después me maquillé yo, en un momento no podía creer que he maquillado tantas novias y ahora era mi día y lo estaba haciendo conmigo misma.

Estaba feliz, pues sabía perfectamente qué tipo de maquillaje quería, tonos, correcciones, etc.

Así desde las 8am que empezamos, hasta que dieron 3:30 y ya todas estábamos arregladas, me ayudaron a ponerme mi vestido, fue una sensación tan bonita y no podía creer que estábamos a una hora de empezar con la ceremonia, uno de mis cuñados llegó al hotel para llevarme a la iglesia, íbamos con perfecto tiempo y sin presiones, por primera y única vez sentí esas miradas de todas las personas que me veían dentro de la camioneta y los carros que tocaba el claxon para felicitarme durante el transcurso del hotel a la iglesia. Llegamos a la iglesia y dentro de la camioneta ví a mi esposo guapísimo. Se veía súper tranquilo, contento y relajado con su gente alrededor. Me esperé unos 10 minutos adentro, hasta que salió el padre y empezó a acomodar a las damas, best man, y padrinos, en realidad en ese momento sí empecé a sentir nervios. Pues todos estaban ya acomodados y yo estaba sola en la camioneta y pensé que me habían olvidado pues no había alguien que me ayudara a decirme en que momento bajar y ayudarme con el velo, que por cierto medía 11 metros. La verdad, de tantos nervios que sentí en ese momento, no recuerdo quién fue a avisarme para que me bajara, mi papá ya me estaba esperando en la entrada, junto con las meninas, fue un momento de caos pues mi papá de tan nervioso que estaba se puso a un lado de las meninas agarrando mi velo hasta que el padre le dijo casi casi que se quitara de ahí.

Me agarró del brazo y entramos, como el velo estaba muy largo, las meninas lo agarraron de otro lado y a la mitad del camino al altar me lo jalaron súper fuerte y se cayó. La verdad es que en ese momento nada me importó más que llegar al altar con mi esposo y tomarlo de la mano, cuando llegué se acercó a mi oído y me dijo (te ves preciosa) me emocioné y la misa estuvo hermosa, me encantó como habló el padre y todo lo que nos dijo, al momento de decir nuestros votos, lloré.

Es una sensación indescriptible y hermosa. Algo que me preocupaba era, que me dieran náuseas en la misa, por suerte el bebé se portó de maravilla y no sentí nada.

Acabó la misa y al momento de voltear alrededor de la iglesia me emocionó tanto ver a todos nuestros invitados en la misa aplaudiendo. Salimos y todos se acercaron a felicitarnos, de ahí nos fuimos a la sesión ya en la playa y de ahí entramos al jardín de la recepción, todo fue muy lindo y especial, la fiesta fue con las personas más especiales para nosotros y ver a todos contentos y bailando, disfrutando el momento con nosotros me hizo darme cuenta que absolutamente todo el gasto valió la pena. Todo estuvo muy bien, desde el brindis, el vals, la parte del pastel, todo salió mejor de lo que esperábamos mi esposo y yo.

Los proveedores excelentes. Todos contactados gracias ésta súper útil aplicación.

Deseo que todos y todas disfruten el proceso de plantación de su boda y que ese día sea uno de los más felices de su vida.