La boda de Miguel Ángel y Margarita en Pátzcuaro, Michoacán

La crónica de nuestra boda

Fue mi día, literal, me levanté temprano, y me subí al cuarto del hotel donde me peinaron y me arreglé, estuve sola, pues nadie de mis damas estuvo conmigo y los disfruté muchísimo, estuve tranquila disfrutando cada instante, mi dama de honor tampoco llegó así que entre la chica que me peinó y la que me maquilló me ayudaron a vestirme y estar lista para salir a la Iglesia.

Me sentía muy feliz y tranquila, el hotel donde nos hospedamos se encargó de todo del banquete, así que no tenia ninguna preocupación y decidí no estresarme ese día. La misa preciosa, la música que escogimos, unos violines fui ideal, el padre nos habló precioso. Cuando salimos de misa nos fuimos a tomar unas fotos, y después llegamos a la recepción donde ya estaban todos los invitados, disfrutando de unas entradas muy al estilo michoacano, charales, guacamoles, queso frito y de menú elegimos un buffet michoacano, que a todos les encantó, la decoración era blanco y rojo y nuestros centros de mesa unas nochebuenas dando alusión al mes de diciembre.