La boda de Mariana y Pacho en Monterrey, Nuevo León

Después me puse a armar mi ramo y el de mis damas y en eso llegaron las chicas que me arreglarían para tan especial día, nos dirigimos al cuarto de mis papás y empezaron con su magia para dejarme hermosa para mi boda con el hombre al que amo, mi maquillaje estuvo hermoso, me encantó cómo jugaron con los colores que escogimos para la boda, se veía espectacular.

Después de que terminaran con mi arreglo, bajé a comer algo, porque ya iban a dar las 3 y mi esposo iría por mí a las 4 para irnos a la sesión formal, me lavé las manos y los dientes y subí para que me pusieran el vestido, porque no sabíamos cuánto nos llevaría, las chicas de la casa de novias ponen tan fácil los vestidos, no sabíamos el tiempo que requeriría, así que pusimos manos a la obra mi mamá y yo, mis primas querían verme y cuando mi mamá salía de la recámara a buscar algo, le preguntaban que si ya estaba lista, que ya me querían ver cuando terminaron de ponerme el vestido, me puse el velo corto y salí de la recámara, me sentía tan hermosa, tan feliz, que no podía disimularlo, me tomé fotos con mis primas y con mi sobrina y en eso, llegó un regalo de una muy querida amiga, nos envió un arreglo floral con un mensaje muy bonito deseándonos lo mejor en nuestro matrimonio.

Y en eso, llegó el amor de mi vida por mí. Les pedí que nos tomaran muchas fotos y a mi primo que me tomara video porque quería tener plasmado ese momento tan mágico, estaba escondida a un lado de la puerta para que no me viera y me quería asomar para ver a mi esposo y mi primo me decía hazte para allá. Cuando me dijo que se aproximaba hacia donde estaba, me asomé y lo vi, tan guapo con su traje, se veía muy bien, muy guapo, me encantó, pero lo que nunca olvidaré, es su cara y las miles de cosas que me dijo con su expresión, vi una emoción en su rostro que nunca había visto, me abrazó, me besó y me dijo que me veía hermosa, más hermosa de lo que normalmente me veía, nos subimos al carro y no contábamos con que mi vestido abarcaría casi toda la parte de atrás, así que tuve que irme sola hasta la locación de la sesión.

Llegamos a la sesión y los fotógrafos ya estaban esperándonos, había demasiado aire y en eso, el velo se me voló y el fotógrafo tuvo que ir corriendo por él, lo bueno fue que no se alejó mucho, pero fue muy cómico, anduvimos como locos caminando por la locación, no fue muy alejado y el clima nos ayudó bastante porque no hacía tanto calor, algo que pasó y fue muy especial para mi esposo, es que en uno de los puntos en los que nos encontrábamos para las fotos, había muchas libélulas sobre nosotros, que nos hizo saber que su mejor amiga estaba con nosotros ese día tan especial también.

Después de la sesión, pasamos al hotel, (que quedaba muy cerca de donde estábamos) a que Pacho se cambiara la camisa por la que usaría en la ceremonia y para que pudiéramos descansar y refrescarnos un poco en lo que daba la hora de irnos a la misa, estuvimos ahí como media hora y partimos hacia la iglesia, en donde todos nuestros amigos y familiares iban llegando, tuvimos que esperar un poco, porque estaba una quinceañera antes que nosotros en la iglesia, pero no esperamos tanto, llegó el padre, le entregué el misal que había hecho y nos dijo cómo entraríamos, mis suegros llevaron a Pacho y mis papás a mí, fue un detalle maravilloso que ambos padres pudieran llevarnos al altar, es algo que no puedo describir, estuvo hermoso.

Entró el cortejo detrás de Pacho y cuando acabó la canción de entrada de ellos, llegó mi hora de entrar del brazo de mis papás... La marcha nupcial de Wagner me llenó los oídos y estaba tan emocionada, que las lágrimas se me querían salir, pero no podía dejar de sonreír, fue demasiado bonita esa sensación, fue indescriptible saber que el día que habíamos estado esperando con tantas ansias, por fin hubiera llegado. Y entonces, mi papá puso mi mano en la mano de Pacho y la misa comenzó. La música que elegimos para la iglesia, fue hermosa, mágica y encajó especialmente con el momento, cada pieza, era mágica.

Al momento de decir nuestros votos, la emoción me llegó a flor de piel y la voz se me quebró un poco, pero al verlo a los ojos, supe que todo estaba bien, todo estaba perfecto y que todo sería así siempre y que ambos compartíamos el sueño de estar juntos y que por fin, se había hecho realidad, le puse el anillo y el padre nos dijo que nos declaraba marido y mujer y que podíamos besarnos, todos nos aplaudieron y cuando volteé, toda la gente sonreía, todos nos veían con mucha alegría, con mucho amor y eso me llenó más de felicidad, es indescriptible.

Terminando la ceremonia, nuestras familias y amigos nos esperaban afuera para felicitarnos y desearnos lo mejor, nos tomamos fotografías con algunos y nos dispusimos a partir a la recepción.

La luna ese día, estaba hermosa, llena y enorme, mi mamá me comentó que precisamente y sólo por ese día, estaría más cerca de la tierra y que se vería gigante, pero no me esperé que se viera así.

Después, pasamos a comprar agua y algo ligero para comer porque Pacho no había comido nada, todos nos veían raro, pero no nos importó porque queríamos compartir con todos que nos habíamos casado al fin.

Llegamos al hotel a la recepción y ya había mucha gente esperando para entrar, no faltaba mucho para que pudieran pasar, así que saludamos a los que no habíamos podido saludar en la iglesia y recibimos más felicitaciones y más buenos deseos.

Al momento de subir a la recepción, ayudé a las hostess a acomodar a la gente, porque no le entendían a la lista que les había enviado, pero hasta eso, fue divertido y me dio gusto ver quiénes nos acompañaban ese día.

Cuando nos tocó entrar para abrir el evento, pude ver cómo estaba arreglado el salón, se veía hermosísimo, muy elegante, todo perfectamente hecho, como de ensueño, anunciaron nuestra entrada, recorrimos la pista y nos pusieron la canción que había elegido para ese momento tan especial: Llegaste tú de Luis Fonsi y Juan Luis Guerra, se me salieron las lágrimas de la emoción, ya no pude contenerme, lo besé, lo abracé y le dije cuánto lo amaba, fue un momento mágico que no olvidaré nunca.

Después bailamos el vals con nuestros papás, elegimos la canción de Alex Ubago, Por Tantas Cosas, son momentos que nunca olvidaremos y que se quedarán tatuados en mi mente, mi papá le dedicó unas palabras a Pacho, que me hicieron llorar de nuevo y después nos dispusimos a bailar en lo que servían la cena, todo estaba delicioso y tuvimos el privilegio de que el chef nos cocinara el plato fuerte en la mesa.

La fiesta estuvo de maravilla, todos se veían felices, Pacho bailó como nunca en su vida, nos divertimos bastante a la hora de la víbora de la mar y de la liga y el ramo, reímos muchísimo durante toda la fiesta, los zanqueros que llegaron, nos sorprendieron, ni siquiera me acordaba que irían, pero estuvo demasiado divertido, fue mágico cada detalle, cada sonrisa de cada invitado, todo el amor que se sentía en el aire... Partimos el pastel y el baile siguió hasta las 3 de la mañana, para culminar el evento, el animador nos llamó a la pista para cerrar la fiesta con nuestra canción.

Podría pasarme el día entero redactando más y más, pero sólo puedo decir que nuestra boda fue perfecta y que disfrutamos cada instante con las personas que amamos y que nos aman por igual.

Y sé que viviremos felices para siempre <3