La boda de Gabriel y Jimena en Gustavo A. Madero, Ciudad de México

¡El gran día había llegado! Desperté 7:30 y para mi sorpresa estaba super tranquila, llena de paz, de alegría y emoción. Mi hermana llamó para ver como seguía, aún tenia un poco de resfriado pero iba mejorando. A las 10:00 am llegó una chica que me haría pedicure, así que me senté y me relajé un rato. A las 11:30 llegaron maquillista, peinadora y fotógrafo, y todos se sorprendían de verme tan tranquila, el fotógrafo incluso me dijo "jamás había estado en casa de una novia donde todos estuvieran más nerviosos que la novia". Comenzaron a maquillar y peinar a mi mamá en lo que yo hacia unos detalles que había dejado pendientes. Mi hermana me llamó para decirme que ya había recogido mis ramos y los de las damas en la florería, y justo cuando colgué con ella me llamó el proveedor de los ramos para decirme que ¡había olvidado mi ramo principal! La verdad no me estresé, pero si empieza la cabeza a dar vueltas para ver como lo puedes solucionar, aunque aun era temprano y después de buscar ayuda fallida con algunos familiares para ir por él, termine enviando un Uber y llegó a casa intacto. Mi hermana casi muere del susto.

Me maquillaron y peinaron e iba con todo el tiempo a mi favor. Eran 2:20 pm y yo ya estaba lista para ponerme el vestido y salir. Pero aun era muy temprano. Así que me quedé en bata, nos comimos unos sándwiches y nos sentamos a platicar unos minutos mi mamá, mi hermana, la maquillista, el fotografo y yo... El fotógrafo aprovechó para tomarme unas fotos con mi bata y unas sin ella de espaldas, pero me da pena enseñarlas porque se me ve la lonjita. Por cierto, la gripa había desaparecido. Mi prometido me había mandado unas flores hermosas con una tarjeta que decía “Tenemos una cita a las 5:00, te amo” Awww, lo amo.

Cuando era hora me puse mi vestido llena de emoción y muchos sentimientos. Bajó mi hijo arreglado y ¡que guapo se veía! ¡La boda ya era real! Yo era una novia en toda la extensión de la palabra. Chicas, de verdad se siente increíble verte al espejo así. Llegó el auto que rentamos y como me gustó. Los vecinos estaban al pendiente para vernos salir de casa.

Salimos de casa 4:10 y llegamos a la iglesia muy temprano tuvimos que estacionarnos atrás de la iglesia para que nadie nos viera aún. Esperamos unos minutos antes de dar la vuelta al frente de la iglesia y por fin bajar del auto y empezar ésta travesía. y yo seguía muy emocionada pero súper tranquila, no podía dejar de sonreír. Cuando ya iba a ser la hora me bajé del coche, entre a la iglesia y me forme detrás del cortejo, mis damas se veían hermosas. Todas lucieron super bonitas con sus vestidos y sus ramos.

Los sobrinitos que sostendrían los letreros de “aquí viene la novia” y “vivieron felices para siempre” se veían divinos. Estábamos sonriendo mucho y se notaba la emoción en todos, pero ¿qué creen? el Padre no estaba aún y tardó 15 minutos en empezar la misa y justo ahí parada al principio del pasillo, detrás de todo el cortejo, me dió todo el nervio del mundo. Fueron 15 minutos super largos, qué hicieron que sintiera toda la emoción, nervio, alegría y nostalgia juntos. Me temblaban las piernas, se me aceleró la respiración, llegaban mas invitados, me saludaban de lejitos, tomaban fotos y yo sólo bailaba de un lado a otro. Estaba que moría de verdad. Por fin la Marcha Nupcial comenzó a sonar y el nervio desapareció al caminar hacia el altar del brazo de mi mamá y mi guapísimo hijo, (dándome cuenta de que 4 metros de velo si pesaban) sólo me enfoqué en una cosa… Él. Estaba sonriente y deslumbrantemente guapo. Y como algo tan mágico pasa tan rápido y tan lento a la vez. Seguí caminando y a tan sólo 3 metros de llegar a sus manos.. él quebró en llanto. Lo que hizo que muchos invitados también lo hicieran, fue algo mágico, indescriptible y emotivo. Mi mamá le dijo “te entrego a mi corazón” él respondió entre lagrimas “lo sé” y yo no pude decir nada. La misa empezó, llena de palabras bellas, lagrimas, sonrisas, mucho amor y compromiso ante Dios.

Al terminar y salir por el pasillo tomados de la mano, me tomé un momento para detenerme, besar y abrazar a mi esposo y pensé ¡lo hicimos! ¡estamos casados! Él me abrazó me dijo “¡Soy muy feliz!”.

Después de salir entre pétalos, gritos, aplausos, muchas fotos y felicitaciones. Nos fuimos en nuestro bello auto al jardín... al entrar quedé impactada, todo se veía mucho mejor de lo que imaginé. Estaba lleno de luces, flores, una decoración perfecta, música linda de fondo. Todo lo elegimos nosotros pero verlo montado es indescriptible.

Comenzamos con una pequeña sesión de fotos en lo que los invitados comenzaban a llegar, a acomodarse y a poner su huella en nuestro árbol.

Minutos después, nos informaron que el juez estaba listo, así que tomados de la mano fuimos a nuestra boda civil, una ceremonia corta pero emotiva. En medio de la ceremonia nos tomó por sorpresa que nos pidiera decirnos unas palabras así que, entre nervios, emociones, algo de shock y algunos “¡tú puedes!” de nuestros invitados, nos dijimos lo que salió de nuestro corazón, lloramos un poquito, nos abrazamos, y ahora si! eramos esposos también ante la ley.

Entramos a la fiesta con la alegría de que el salón estaba lleno, todos estaban ahí, felices, gritando y aplaudiendo, sabía que habíamos elegido bien a nuestros invitados pues de verdad estaban felices con nosotros y la presencia de cada uno de ellos nos llenaba el corazón.

Lo primero que hicimos fue cenar, ¡una cena deliciosa! mientras un cuarteto de cuerdas nos acompañaba; al terminar hicimos nuestro brindis con los invitados y rompimos nuestras copas como símbolo de felicidad y por ultimo partimos nuestro pastel.

Era hora de los bailes. Mi esposo bailó con su mamá "Amor de Madre" de Victor Manuelle mientras ambos lloraban abrazados, un momento único, es el primer hijo hombre que se casa así que mi suegra estaba feliz y muy emocionada. Después fui yo quien bailó, pero al no tener a mi papá a mi lado, baile con mi persona mas importante: mi hijo. En cuanto nos presentaron mi familia se desbordaba en aplausos. Pues nadie sabía que había elegido bailar con él. Fue un momento mágico. Mi hijo lloró mucho y me abrazaba tan fuerte. Todos estábamos en lágrimas… todos. Bailamos “You're the Inspiration” de Chicago… la letra es divina y se la dedico por completo a él… aun hay mucha gente que me dice que lloró mucho en esos momentos.

Era nuestro turno… bailamos “Hold On” de Michael Buble una canción bellísima que habla de un amor, uno que no es perfecto pero es incondicional; después de un minuto de bailar juntos, solos, olvidándonos de todo alrededor y de decirnos al oído lo felices que éramos.

Comenzamos con nuestra coreografía, sobre la misma canción hicimos una baile sencillo, una coreografía que preparamos a escondidas. Nadie (ni nuestros papás ni hermanos) sabia que lo haríamos por lo que todos se emocionaron mucho y estaban sorprendidos. Terminamos y nos abrazamos con muchísimo amor.

Todo listo. Dejamos atrás las lagrimas. La fiesta comenzaba y empezaron todos a bailar. Amamos la actitud, la energía, la felicidad y las ganas con las que cada uno de nuestros invitados disfrutaba la fiesta.

El grupo superó mis expectativas que ya de por si eran altas, el servicio del jardín increíble, todos los detalles que preparamos lucieron. Todo era mejor de lo que imaginaba. Y mi esposo y yo nunca dejamos de sonreír y de gozar.

Llegó el momento del ramo y la liga, fue super divertido. Hicimos la Víbora de la Mar con las mujeres, y luego a lanzar mi ramo (no sin antes bailar con todas), enseguida me senté en una silla para la búsqueda y lanzamiento de la liga. Mi esposo me bailó y me quito la liga super sexy. No quisimos hacer Víbora de la Mar con hombres porque se ponen muy locos, así que decidimos darles tragos de tequila mientras pasaban en rueda debajo de nosotros, y créanme... fue la mejor decisión. Porque fue super divertido, chistoso, sin peligro para nadie y a todos les gustó la idea.

Después los hombres decidieron cargar a mi esposo y lanzarlo por los aires, al último tomamos fotos con todos.

Y así seguimos… 7 horas de fiesta que se disfruto cada instante, que estuvo llena de energía y de gente divertida bailando en la pista todo el tiempo.

Durante la fiesta el grupo se preocupó siempre por hacer todo divertido y único. Brincamos la cuerda, bailamos con sombreros chistosos, había música super variada. Mientras sonaba la canción de Gloria Trevi, salió el “Doctor Psiquiatra” a darnos shots con jeringas, repartimos termos con frases chistosas, a los invitados que de inmediato cambiaron sus tragos a ellos y lucieron super bien. Un detalle fue que al momento de repartir chilaquiles (la ultima hora de la fiesta) nos dijeron que había aun mas del 90% de los invitados... ¡nadie se había ido! eso nos decía que de verdad todos gozaban la fiesta ¡todo fue increíble! ¡La fiesta continuó hasta las 4:00 am!

Cuando estaba todo por terminar nuestros pies no podían más. Habíamos bailado y brincado toda la noche, nos sentamos un momento, sólo un minuto tomados de la mano viendo como la fiesta seguía como si acabara de empezar, toda la gente seguía ahí, todos sonreían, bailaban, y se seguían divirtiendo a lo grande. Ahí comprendimos que cada preparativo, cada peso invertido, cada esfuerzo había valido completamente la pena.

Mi esposo me volvió a decir lo que feliz que era y que prometía hacerme tan feliz como lo fui ese día. Nos volvimos a parar a bailar y reír hasta que terminó todo, regresamos a casa, nos tomamos una ultima foto vestidos de novios, me abrazó y me besó de una forma tan tierna. Y me dijo: “seremos muy felices, lo sé” Y fuimos a dormir (eran las 6:30 am).

Al día siguiente, hicimos una carne asada con nuestra familia cercana, abrimos nuestros regalos y convivimos mientras cada quien platicaba su perspectiva de la fiesta, al terminar nos despedimos de la familia y desde entonces despierto al lado del amor de mi vida, intentando ser la esposa que siempre soñó tener.

Hoy, poco mas de un año después seguimos disfrutando haber tenido una boda increíble y seguimos recibiendo comentarios de nuestros invitados en donde nos dicen que "jamás habían ido a una boda tan divertida" o definen nuestra boda como genial divertidísima y romántica. Así que seguimos convencidos que lo hicimos muy bien.

Novios, disfruten cada momento, guarden en su corazón y memoria cada detalle, gocen de quienes los acompañan, todo fue planeado con amor, así que despreocúpense si sale perfecto o no, lo perfecto lo hace quien está a su lado empezando a compartir su vida con la de ustedes. Miren todo a su alrededor y bailen y rían como nunca.

Gracias por leerme. Esta comunidad ha sido parte importante de mi camino.