La boda de Ernesto y Evelia en Zapopan, Jalisco

Poco antes de las 2:00 pm empecé a vestirme, ya llegaba un poco de nervios, el carro estaba programado para que llegara a las 3:45 de la tarde; La misa era a las 5:00 pm. Así que seguíamos entre mis madrinas y yo a acomodarme el vestido los accesorios los zapatos y que llega el carro.

Todo empezó a ir con más prisa, baje a mi retoque de maquillaje y peinado antes de salir. Al bajar están todavía las maquillistas así que las expresiones y tanto piropo tan bonito fue la sensación más linda. Y fue ahí donde todos los sentimientos explotaron. El nerviosismo por la boda, la emoción de que el gran día había llegado, el sentimiento de tristeza, que mis padres ya no están conmigo pero con la confianza que desde el cielo me los prestaron para acompañarme en ese gran día y todo ese mundo de sentimientos encontrados llegaron de repente.

Fue tan fuerte todo eso que no sabía si reír o llorar, en fin, me subí al carro llorando de emoción y haciendo un paréntesis les cuento era hermoso el carro, el arreglo que llevaba todo estaba de lujo y el conductor una finísima persona, el me ayudo a tranquilizarme y ayudarme a que el traslado fuera reconfortante para mí.

Y a partir de ese momento empezó toda la adrenalina, salí antes que mis madrinas y que mí prometido, el conductor me dijo que nos íbamos a ir lentos para que me tranquilizara y llegara tranquila a la iglesia, todo era hermoso, llegamos el templo, un templo hermoso, estilo neogótico y considerado la máxima obra en su estilo en México, llegamos con mucha anticipación así que permanecí un momento en el vehículo hasta que por fin la entrada, lo escribo y vuelvo a sentir esa emoción. La entrada al templo, escuchar la marcha nupcial, vuelvo a llorar.

Y cuando creí que todo era perfección, mis madrinas no llegaban, ahora además de todos esos sentimientos llego la angustia porque ellas eran las madrinas de arras y biblia, la misa, ¡Oh! la misa, Dios nos dio su bendición, además de mis padres y mi suegra que en paz descansen, porque fue la misa más hermosa que había escuchado y no es porque haya sido la de mi boda, simplemente fue la mejor y la educación si así se le puede decir al trato que nos dio el Sacerdote, la fue la mejor misa en la que he asistido, y cuando pide a los padrinos y madrinas que se acerquen con las arras, el laso, la biblia y los anillos, ahí fue donde nos dimos cuenta que no habían llegado, me gran amiga hizo lo que estuvo a su alcance para poder cumplir con lo que hacía falta, mis arras fueron unas moneditas de 10 centavos la madrina se transformó en padrino, un compañero de trabajo fue el padrino de arras, la biblia y rosario también fue padrino en lugar de madrina, fue un cuñado quien hizo de padrino y el padre lejos de molestarse nos prestó su biblia y rosario y todo lo que es la boda el Sacerdote nos dio la mejor boda que podíamos haber recibido, todo fue hermoso aun con todo y lo que planeamos no se dio. Aquí entra el dicho que el hombre propone y Dios dispone, eran puras madrina y solo un padrino, y quedo de esta manera, son puros padrinos y nada más una madrina.

Terminando la misa fue nuestra sesión de fotos en el templo, de ahí nos dirigimos al salón, el traslado está de más que les diga el trato nuevamente de nuestro conductor, el brindis en el carro y todo lo agradable que fue el viaje antes de llegar al salón donde se realizaría la boda al civil.

Mi boda al civil no podía ser menos hermosa que la boda a la iglesia, fue una Juez quien realizo nuestra unión ante la sociedad, fue la mejor boda al civil en la que había estado y era la mía.

Después de un brindis las fotos y las felicitaciones pasamos al salón un lugar hermoso, mi vals con mi marido, ¡Ay! digo mi marido y aun siento tan hermoso, fue muy romántico la canción iba acompañada de un video creo que fue hermoso mi baile, la cena, fue muy rica la cena, pedimos combinada para quienes no les gustaba la carne pudieran intercambiar el platillo todo transcurrió tan rápido.

Terminando nos fuimos de parranda mi marido y yo. Y el lugar que reservo mi marido para pasar la primera noche como esposos, ¡oohh! fue increíble, y al día siguiente a nuestra luna de miel, ahí que más les puedo contar si con todo lo hermoso que fue nuestra boda la luna de miel no podía quedar atrás.

Les comparto esperando que al igual que yo disfruten de ese momento. Y les deseo las mejores de las suertes esperando poder leer después las experiencias de ustedes y saber si el sentimiento es igual para cada una de nosotras. Lo hermoso de ese momento en nuestras vidas.

¡Espero no se me haya pasado ningún dato de mi gran día!

Mi Boda