La boda de David y Monse en Almoloya de Juárez, Estado México
Rústicas Primavera Azul 1 profesionales
El 14/05/2016 373 1 1
D&M
14 May, 2016
La crónica de nuestra boda
Todo el día fue mágico, no dejamos que nada nos arruinara el día y eso que llegué 20 minutos tarde a misa porque el equipo de maquillaje me quedó mal, tengan cuidado con eso. De ahí en fuera desde la llegada a la iglesia fue como un sueño, era tan raro estar vestida de novia y caminar hacia el altar donde el me esperaba, ver la expresión de su cara al verme llegar, es algo que nunca olvidaré.
Las palabras del padre al unirnos en matrimonio nos llenó de una alegría en el pecho como una cálida sensación que hasta el día de hoy se conserva.
De la iglesia fuimos al salón, donde se llevó a cabo la ceremonia por el civil, mientras algunos de los invitados más allegados presenciaban la boda civil, en otra parte del jardín se sirvió el coctel de bienvenida acompañado de una mesa de queso y carnes frías.
Al término de la ceremonia, los invitados pudieron encender globos de cantoya para festejar el enlace.
Posteriormente fue el ingreso al salón, inmediatamente pudimos brindar con nuestros invitado y bailamos nuestra primera pieza como esposos, que fue la de “No te apartes de mí” de Vicentico en ese instante solo fuimos nosotros dos.
Seguir leyendo »Se sirvió la cena de tres tiempos al son del saxofón en vivo. Al terminar la cena, al ritmo de la canción “Y cómo es él” de José Luis Perales la novia sacó a bailar a su papá conmoviendo a todos los invitados.
De ahí en adelante la fiesta no paró, la partida del pastel y la mesa de postres le dieron un toque muy dulce a la fiesta; la víbora de la mar fue sumamente divertida, el Grupo Mayday amenizó en todo momento llenando de distintos suvenires a los invitados de acuerdo a la música que se interpretaba, las mojigangas y zanqueros prendían aún más el ambiente, a las 2 de la mañana ya con las pilas más bajas se sirvió la tornaboda para reanimar a los invitado para la gran llegada de la banda con tambora, y siguió el baile hasta las 5 de la mañana que salió el ultimo invitado.
Y para cerrar con broche de oro, el recalentado en casa no podía faltar, una cervezas bien frías acompañadas de unos ricos tacos de carnita hicieron que todos reviviéramos, para de esta forma poder abrir los regalos en presencia de nuestros familiares y amigos.
¿Qué más puedo decir? simplemente que fue un día mágico e inolvidable.
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