La boda de Carlos y Karen en Álvaro Obregón, Ciudad de México

Como toda una novia responsable ,salí súper temprano de casa para llegar a tiempo a la iglesia (llegué hora y media antes) mi mamá y yo nos fuimos en la camioneta de mi mamá y pedimos una Uber sub para las damas. ¡Excelente servicio!

Llegamos a Plaza San Jacinto, y las damas se bajaron del Uber y entraron a la plaza de la iglesia, yo esperé en la camioneta porque el novio no quería verme antes por ningún motivo. Yo muy tranquila esperé a que diera la hora (la misa era a las 4:00pm) hasta que me di cuenta que eran 04:05 pm y nadie iba por mi. Comencé a preocuparme, pero me calmé porque era obvio que alguien debería ir por mí.

Llega mi papá corriendo a la camioneta y me dice "ya están todos adentro de la iglesia" ¡y yo me quedé en shock! ¿¡Cómo que ya están adentro de la iglesia y yo sigo en la calle esperando a que alguien venga por mi?! ¡No sabía si llorar, enojarme o qué hacer! Así que me baje de un brinco de la camioneta, y aún con la calle empedrada corrí como Forest Gump, desesperada porque el novio, el cortejo y los invitados ya estaban esperándome.

Claro que mi adrenalina estaba al 100, y no pensé en calmarme antes de entrar así que ¡entré corriendo a la iglesia! ¡Sí! , ¿se imaginan? Todo el pasillo de la iglesia con los invitados viéndome, ¡y yo solo pude correr! Lo único que me tranquilizó fue que lo primero que me dijo mi esposo fue "¡Pareces una princesa!" ¡Claro que yo no podía ser más feliz!!

Una vez en la iglesia el padre se quitó el micrófono y solo me dijo "¿ya estás más tranquila?" yo no sabía en donde esconderme, pero solo asentí con la cabeza y la misa siguió su curso. Entre discursos, anillos, arras y lazo, pasaron los 45 minutos de misa ¡y yo me sentía en las nubes!

Terminando la misa comenzó la sesión de fotos con la familia, con las damas y ¡oh sorpresa! ¡Los bestman ya se habían ido al jardín! así que tomamos las fotos con los que aún estaban por ahí, y seguimos nuestro camino al jardín.

Una vez llegando al jardín estaba mi maquillista esperándome para cambiar mi maquillaje y peinado para la recepción. ¡Me encantó hacerlo! En lo que todos los invitados entraban y firmaban el libro, los recibían con unas piñas coladas y los llevaban a sus mesas.

Llegó el momento de entrar al jardín, ¡y estábamos mas nerviosos que en la iglesia! Teníamos mucha emoción de ver por fin cómo había quedado todo. Nos dan la orden, suena la canción de entrada "I was made for loving you- Kiss" y lo primero que vi fue el hermoso pasillo de velas. Entramos al jardín y estaba ya el 90% de los invitados, el jardín hermoso ¡y todos muy felices!

Pasamos a nuestra mesa de esposos y cenamos delicioso. Decidimos dar un menú de 5 tiempos por la hora a la que era la recepción y que aguantaran toda la bailada y la tomada los invitados. Menú: Torre de jitomate y queso, sopa minestrone, pasta en chile ancho con tocino crujiente, lomo en salsa de vino tinto y de postre nuestro delicioso pastel de limón.

Terminó la cena, hicimos el brindis, nuestro primer baile de esposos con la canción "Nothing’s gonna stop us now - Straship" ¡y comenzó la fiesta!

Todo fue perfecto y divertido, salvo 2 cositas que les platico para que pongan especial atención. El DJ la verdad es que no fue muy bueno, había canciones que de plano la pista estaba vacía, y por otro lado nosotros calculamos el alcohol pensando que lo que más se toma es una cuba ¡y no! todos TODOS tomaron tequila, así que a la mera hora a conseguir más tequila, porque se había acabado.

Dieron las 2:00 am, hora en la que supuestamente acababa la boda y los invitados (amigos) seguían en plan de fiesta, así que hasta las 3:30 am que dijimos "ya no podemos más"

Les dejo unas fotos de mi gran día B, y les agradezco muchísimo por cada palabra, cada consejo y cada anécdota compartida. ¡Todo me ayudó a disfrutar más todo!