La boda de Felipe y Yareli en Culiacán, Sinaloa

La crónica de nuestra boda

Se llegó el gran día, los preparativos estaban listos, pero tuvimos que correr. A pesar de que el salón nos ofreció decoración, decidimos hacer algo diferente, pues nuestra boda fue temática, ¡sí! La hicimos al estilo "Harry Potter", así que mucha de la decoración fue hecha por mis propias manos y las de mi familia.

Los nervios no se sintieron tanto como creí que sentiría, mientras me ayudaba mi madre a ponerme mi vestido, sentía más emoción que nerviosismo. Mi papá fue el chófer de honor, el que me condujo directamente al lugar de la ceremonia, se sentía algo tenso, pero pienso que era normal. Con el pasar de las horas los ánimos mejoraron, toda la familia estuvo ahí con nosotros acompañándonos, antes de llegar al salón. Tanto el novio como el suegro (mi papá) hicieron la travesura de llegar a sentarse a comer tacos en una carreta ja, ja, y todos se les quedaban viendo, bien "entrajados" y con un chorro de hambre (no habíamos desayunado de tanto corre y corre), aunque en realidad fue más una tradición que mi mamá quiso seguir, pues en su boda, mi papá y ella hicieron lo mismo (llegaron a comer taquitos vestidos de novios), ja, ja, ja, lo curioso fue que ni mi mamá ni yo nos bajamos del carro, pues pensábamos que los pedirían para llevar, ja, ja, ja, pero no se sentaron a cenar bien "agustote", mientras moríamos de hambre.