La boda de Carlos y María Alicia en Mérida, Yucatán

La crónica de nuestra boda

Soy el novio. Un día antes hablé con mi ahora esposa, le dije que tratará de disfrutar todo el evento, que salga como tenga que ser la fiesta y la misa, me dijo en un tono medio convencido, está bien. Ya el día 19 no nos vimos, pero que su casa estaba hecho un show, su mamá, las damas, los fotógrafos, y ella super estresada porque no cabían todos, hasta que por fin ya la maquillaron, la arreglaron. Fue la última en salir en el coche de novios. Yendo a la iglesia, se equivoca de camino el chofer, llegan casi 7:35 a la iglesia, y a las 7:30 estaba programado la ceremonia. Ya estábamos todos listos, entramos y vi la hermosura de mi esposa que entró a la iglesia. procedió la misa, hasta que ya fuimos un matrimonio.

En la fiesta, que fue en un local con aire, ya estaban listas las mesas e hicimos los cajones que están de moda. La música ya estaba armonizando la recepción, los familiares y amigos ya empezaban a llegar. Nosotros desde que llegamos fotos por aquí y por allá, saludando, recibiendo los regalos, que por cierto, igual abrimos mesa de regalos. Todo excelente, se empezaba la gente a quitar la pena para bailar, ya hasta que llegó la hora de baile de novios, todo bien, aunque no lo practicamos. Se hizo el brindis con los papás y los padrinos, y un tío fue el que dio las palabras. Seguían la botanas (que casi ni comimos, aunque ya estábamos advertidos). Siguió el baile muy bueno, todos felices, nosotros entre baile, por ratos sentados separados con nuestros amigos y familias, fotos y más. Hasta que llegó la hora del ramo, todas las mujeres empezaron con el relajo, hasta que a una niña (literal) agarró el ramo, otras que de verdad están por casarse no se hicieron de él, pero en fin. Después toco el liguero, un baile a mi esposa, que tampoco practiqué, pero la gente se divirtió y mi esposa toda apenada, pero muy bien, hasta que tiré el liguero y el clásico novio para arriba y desvestido, para después mi esposa pasarme la ropa. Siguió la fiesta hasta las 3 de la mañana (ya que era céntrico), todo muy bien y los dos felices.